Busca la paz y la calma en tu interior. Busca el silencio en el que puedes encontrarte contigo mismo... y si quieres, también con Dios. Nos ponemos en presencia del Señor. En el nombre del Padre, del Hijo, del Espíritu Santo. AMÉN.
Mª Eugenia y Teresa Emmanuel fueron las dos religiosas que comenzaron La Asunción. Se unieron para poner en marcha el plan que Dios tenía para ellas.
Y desde el principio, el espíritu de familia que aún hoy sigue notándose tanto en La Asunción, fue algo muy importante. Por eso quisieron forjar un amistad fuerte, unidas por la amistad que cada una tenía con Dios. Sin embargo, ¿sabéis qué? no lo tuvieron nada fácil...
María Eugenia no sintió una simpatía inmediata por Teresa Emmanuel cuando la conoció. Las dos tenían caracteres fuertes y muy diferentes. Y como todas las amistades verdaderas, construyeron la suya con el tiempo. Aprendieron a valorar sus diferencias de carácter como una riqueza por la que merecía mucho la pena esforzarse.
¿Y tú? ¿Te esfuerzas por crear amistades sólidas y verdaderas?
Una de las cosas que hacían una por la otra era rezar.
¿Has rezado tú alguna vez por tus amigos?
¡Hoy vamos a hacerlo!
Traemos la vida ante el Señor: Vamos a hablarle hoy a Dios de nuestros amigos. Vamos a dejar un momento de silencio y, en nuestro interior, le hablamos a Dios de ellos, dándole gracias por ellos o pidiéndole que les ayude en sus necesidades. (Dejamos un momento de silencio)
ORACIÓN
Gracias Señor por nuestro colegio, por tener profesores que nos enseñan muchas cosas y nos cuidan con cariño.
Gracias también por los compañeros, con los que podemos compartir y jugar.
Gracias por todas las personas que trabajan en el colegio, las que lo limpian y lo cuidan.
Te pedimos que todo esto que tenemos llegue a todos los niños de la tierra.
AMÉN
ruega por nosotros.