Respira con calma, relaja tu cuerpo y tu mente. No te preocupes por nada ahora... Haz silencio un momento... En este silencio nos ponemos en presencia de Dios, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. AMÉN.
Jesús hablaba mucho con sus amigos. ¡Y le encantaba hablar con los niños!
¿Recuerdas haber hablado con confianza con Jesús en algún momento: en la oración, en la capilla, en una convivencia, un campamento, en una Eucaristía...?
Fíjate en dos cosas que habló Jesús con sus amigos y que ellos nunca olvidaron.
"La paz os dejo, mi paz os doy; no os la doy yo como la da el mundo. Que no tiemble vuestro corazón ni se acobarde."
"El Espíritu Santo que enviará el Padre en mi nombre será quien os lo enseñe todo y os vaya recordando todo lo que os he dicho."
Traemos la vida ante el Señor: Podemos compartir peticiones, gracias o pensamientos surgidos en la oración.

Léelas despacio un momento, en silencio... Nos las está diciendo también a nosotros.
¿Cuál tiene hoy más sentido para ti? ¿Por qué crees que te llama más la atención esta palabra o frase? Dios nos habla a través de su Palabra, pero hay que hacer silencio y escuchar con atención para darnos cuenta.
Sta Mª Eugenia de Jesús,
ruega por nosotros.