Respira con calma, despacio...y dispón tu corazón para este momento de oración. Nos ponemos en presencia de Dios. En el nombre del Padre, del Hijo...
Pronto celebraremos el día del DOMUND, el DOMINGO MUNDIAL DE LAS MISIONES.
Hay muchas personas buenas que han dedicado un tiempo de su vida a llevar el AMOR de Dios a lugares lejanos.
¿Conoces personalmente a alguno?
¡Claro que sí! A ver si te suenan algunas de estas caras... Algunas son de hace varios años...¡hay que tener buen ojo!
¿Cómo sabrían que Dios quería que fuesen misioneros?
¿Quién les ayudaría a hacer su sueño realidad?
¿Cómo sería su experiencia?
¿Te gustaría a ti vivir una experiencia así cuando seas mayor?
(podemos compartir)
Y hay algunas personas que se sienten llamadas a entregar no solo una parte de su tiempo sino ¡toda su vida! Como las misioneras de la Asunción con las que hablamos el año pasado ¿las recordáis?
¿Cómo sabrían que iban a ser felices siendo misioneras?
¿Qué sería lo más difícil que vivieron?
¿Y lo más bonito?
(podemos compartir)
¿Sabes qué fue lo que les hizo a todos hacer las maletas y animarse a viajar lejos de sus casas para ayudar a los demás? Sentir que Dios les quería... tanto, que necesitaban compartir ese Amor con los demás. No podían vivir sin contar a otros lo que habían visto y oído (como dice el lema del DOMUND este año)
Y, ¿sabes qué? Que Dios te pide eso a ti también. ¡Y a mi! ¡A todos!
No es que nos pida a todos irnos lejos, ese sentimiento solo se despierta en algunas personas. Pero nos pide a todos que hagamos eso aquí mismo, en el cole, en la casa, en el barrio... llevar AMOR a los que lo necesitan. Y si alguna vez no sabes cómo hacerlo o te da miedo ¡no te preocupes! Dios te ayuda.
Rezamos juntos la oración del DOMUND de este año (la tienen ellos) y recogemos los sobres que hayan traído.
SANTA Mª EUGENIA DE JESÚS, RUEGA POR NOSOTROS