Buscamos como cada mañana ese silencio que nos conecta con nuestro interior, nos ponemos en una postura que nos ayude a adentrarnos en nosotros mismos… Hacemos silencio y nos ponemos en presencia del Señor. En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
A veces parece que en el mundo quien más cuenta es el más listo o el que más recursos tiene, el más guapo o el más "popular"... Y a veces, para el mundo no cuentan los más pobres, los que lo pasan peor... En la época de Jesús también pasaba: no contaban las mujeres, los niños, los enfermos, los pobres...
No todo es negativo, la humanidad ha avanzado mucho en cuestiones sociales. Pero desde siempre, para Dios, los más pobres, los que lo están pasando mal, son los que más cuentan, los más importantes.
A eso se refería Jesús en las bienaventuranzas:
"Dichosos los pobres de espíritu, porque de ellos es el Reino de los cielos. Dichosos los que lloran, porque serán consolados. Dichosos los que sufren, porque heredarán la tierra. Dichosos los que tienen hambre y sed de justicia, porque serán saciados."
Y nos pide a nosotros que le ayudemos, por eso rezamos por ellos y colaboramos con el DOMUND.
Vamos a rezar escuchando y viendo... y después pedimos por aquello que más nos haya "tocado el corazón"
Sta Mª Eugenia de Jesús, ruega por nosotros.