Una de las sensaciones que hemos podido tener más durante los últimos meses es la de la impaciencia, la urgencia de que todo vaya a mejor. Pero también habremos experimentado la sensación de frustración porque parece que tarda demasiado… ¿Qué nos dice la Palabra de Dios?
|
«Tened vosotros paciencia, fortaleced el ánimo, que la llegada
del Señor está próxima» (Sant 5, 8) |
Cuando anticipas una cita, un
encuentro, un viaje o algo que te llena de ilusión... Ahora empezamos a «esperar»
la Navidad. Y con ella, el Dios-con-nosotros. Es verdad que al mismo tiempo
aparecen otras muchas expectativas tangenciales, y que también llegan por
estas fechas, aunque esta vez con cierta duda… encuentros familiares, regalos…
Está bien eso de esperar, pero tal vez “lo importante de la Navidad”,
“lo de Dios” no se viva con urgencia. Tal vez se trate de tener un poco de
paciencia para lo importante. No correr, sino ir dando pequeños pasos hacia una
vida más interesante y más profunda.
Si tienes paciencia para
lo importante, tú lo haces posible.
Sta Mª Eugenia de Jesús, ruega por nosotros
