1.
Buscamos como cada mañana ese silencio que nos conecta
con nuestro interior, nos ponemos en una postura que nos ayude a adentrarnos en
nosotros mismos… Hacemos silencio y nos ponemos en presencia del Señor. En
el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
2.
Reflexión: José fue un hombre justo, honesto y honrado. Obediente a Dios y
cumplidor fiable de su misión. Al lado de María, su esposa, fue padre de Jesús,
lo educó y lo protegió. Su santidad es un ejemplo a seguir. Dios nos quiere
buenos y justos, sinceros de corazón, comprometidos con Cristo y su
misión. Vamos a tener presentes en
nuestra oración a todos vuestros padres. Le pedimos al Señor que los bendiga y
los proteja.
3. Oración:
·
Te pedimos, Señor, por todos los padres del mundo, en
especial por los nuestros. Bendícelos, ayúdalos, acompáñalos. Que tu fuerza y
tu amor les ayuden a transmitir amor y seguridad a sus hijos. Te lo pedimos, Señor.
·
También te pedimos Señor que ayudes a todas las
familias a las que la guerra ha hecho tanto daño: por muertes, por separaciones
obligadas, por pasar necesidad, por tanto dolor… Te lo pedimos, Señor.
Y ahora, pidamos juntos por las necesidades que vemos a nuestro alrededor.
Santa Mª Eugenia de Jesús, ruega por nosotros.
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.
Amén.