Seguro que te has hecho preguntas como esta alguna vez:
¿QUÉ QUIERE DIOS DE MI? ¿CÓMO QUIERO QUE SEA MI VIDA? ¿CÓMO SUPIERON OTRAS PERSONAS QUÉ CAMINO QUERÍAN SEGUIR?
Muchas veces perdemos el tiempo preguntándonos: ¿Quién soy yo? o ¿cómo soy yo? Está claro que tenemos que conocernos a nosotros mismos para comprendernos, pero puedes preguntarte quién eres y pasar toda una vida buscando quién eres y no llegar nunca a una respuesta clara. ¿Por qué? Porque todos cambiamos continuamente, porque no somos inmutables... Pero, ¿y si, por unos días, cambiamos de pregunta? Párate un poco estos días y pregúntate ¿para quién soy yo? Es decir, ¿quién mueve mi vida? ¿En base a qué deseos, objetivos, anhelos... vivo yo?
SI TE PREGUNTAN PARA QUIÉN ERES, ¿QUÉ DIRÍAS?
Jesús nos dice:
No sois vosotros los que me habéis elegido, soy yo quien os he elegido y lo que he soñado para vosotros es que vayáis y deis fruto y que vuestro fruto permanezca.
Esto nos pueda dar una pista: nos ha elegido para algo,para dar fruto, pero ¿a qué fruto se refiere Dios cuando piensa en ti, cuando te elige a ti y sueña algo para tu vida?
TE PEDIMOS, SEÑOR, QUE DURANTE ESTOS DIAS, LAS PREGUNTAS SOBRE CUÁL ES NUESTRA VOCACIÓN, NUESTRO CAMINO A SEGUIR, NUESTRO SENTIDO ... RESUENEN CON HONDURA EN NUESTRO INTERIOR Y SEAMOS VALIENTES Y GENEROSOS EN NUESTRA RESPUESTA.
QUE ESTA PREGUNTA "¿PARA QUIÉN SOY YO?" NOS ACOMPAÑE Y NOS AYUDE A CRECER.